miércoles, 14 de enero de 2015

102

¿Recuerdas el baño sin puerta que estaba pegado al patio y la cocina en esa casa que estaba casi en obra negra? Un día nos metimos a bañar, y se me antojo hacerte sexo oral, tu estabas de pie, bajo la regadera por lo que tuve que arrodillarme...

Esa sumisión ante tu placer mientras tu como estatua blanda de calor se torneaba ante mi lengua. Me exité pensando en tus pies arqueados sobre mi cabeza, rodeando mi cara, como acariciándola, como indicándome que todo está bien, castigando mi desacierto, friccionando al sentir más placer. Recuerdo el aroma de tus pies y la mirada extraviada que hacías cuando te excitaba algo en nuestra postal erótica. Pienso en ti, en esto y siento que mi boca se derrite por probarte de nuevo...




 ---Hace tiempo te dí indicios o pistas para que encontraras este blog, siendo ingenuo al creer que no podrías encontrarlo con eso, en el fondo no me gustaría que lo leyeras tan pronto, pero del mismo modo tal vez tu no quieres encontrarlo, ya que en realidad es fácil...sólo necesitarías desearlo y buscar el modo---

No hay comentarios:

Publicar un comentario