martes, 7 de febrero de 2017

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Estaba en el trabajo haciendo lo cotidiano y de repente, me acordé que soñé contigo...

Alrededor de las 3 am me había retirado a la cama a dormir y no desperté hasta que la claridad ya asomaba entre la cortina y la ventana. En algún momento de la madrugada recuerdo haberte visto, no sé cómo o por qué, pues únicamente recuerdo tu rostro palidecido, extraño, sin arreglo ni estética...

Normalmente no te recuerdo ni te plasmo en sueños de esa manera, por lo que toma por sorpresa sentir que te veía enferma, desmejorada o sin cuidados físicos.

Al mirarte tuve una sensación de extrañeza, fue raro verte así, en ese lugar y momento cuando no lo esperaba, y claro, no en tu mejor manera en como te guardo en mi. No hablamos, me fui, me miraste y eso fue todo...