jueves, 20 de noviembre de 2014

44

Ya tengo en la mano el sobre con las cartas que encontré:

Documento 1: impresión sin fecha, ni remitente, pienso que es un email que me enviaste poco después de haberme mudado:

-Me la he pasado en vela, llorando, pensando, tratando de tomar el lado bueno de toda esta tormentosa situación, no he podido ver luz desde hace algún tiempo, ¿por que las cosas no son más fáciles?, ¿por qué no podemos estar bien sin tanto drama?, ¿por qué si nos queremos no podemos aceptarnos? Son tantas las preguntas que rodean mi mente que me es dificil poner atención en lo que debo.

En muchas ocasiones creí que podríamos, en otras tantas fué lo contrario, otras más simplemente no quise pensar. No quiero seguir culpándote por lo que nos está pasando, ambos tenemos razón pero también somos responsables en igual grado, creo que fuimos egoístas tanto personalmente como dentro de la pareja, y todo esto es resultado de 6 años de no hablar y no querer hacer las cosas bien.

Todos los miedos, frustraciones, enojos no expuestos y mentiras del pasado son las que en el presente nos nublan la visión del futuro, un futuro en el que me vi contigo y mismo que estiré tanto como a una liga.

El problema: ¡aceptación! ¿acaso debemos moldearnos a gusto del otro? ¿por qué?, es lo que siempre me he negado a cambiar, aunque con el tiempo entendí que muchas cosas de las que me decías tenían lógica y, aunque pareciera que me quedo en el intento, sé que no es así, el avance es lento.

Es difícil querer cambiar algo de tu personalidad cuando desde niña creciste con el ejemplo,  a medida que pasan los años comprendes y creas tus propias bases, y esas con las que aprendiste a ver el mundo pueden moldearse, sin embargo, creo que no desaparecen.

El mérito está en intentarlo, no en sólo decirlo, no tiene ningún sentido exigir si en ti no está la voluntad de querer hacerlo, con poco te vas para abajo, te desilusionas y rendirte siempre es tu puerta de escape. ¡Claro! es más fácil hacer creer que no puedes, tentaciones siempre y en cada esquina habrá, en ti está tomarlas o no. Tiene más valor luchar por lo que verdaderamente se quiere, nadie dijo que sería sencillo, venimos de un intento de relación, misma que nunca tuvo oportunidad de crecer.

Nos falta alentarnos para hacer las cosas bien, apoyo para cambiar esos detalles que hacen esto más dificil y perseverancia-.

No hay comentarios:

Publicar un comentario